Los Siete Ofertorios De La Preciosa Sangre

Autor: Raccolta (edición típica romana)

I.  Padre Eterno, te ofrezco los méritos de la Preciosa Sangre de Jesús, tu hijo Amadísimo hijo y nuestro Divino Redentor, por la propagación y exaltación de mi querida Madre la Santa Iglesia Católica, por la seguridad y prosperidad de su cabeza visible, el Romano Pontífice, por los cardenales, obispos y pastores de las almas, y por los ministros de su santuario.

Gloria al Padre. y al Hijo. y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Bendecido y adorado sea por siempre Jesús, que nos ha salvado por su Preciosa Sangre. Amen.

 

II.  Padre Eterno, te ofrezco los méritos de la Preciosa Sangre de Jesús, tu Amadísimo Hijo y Nuestro Divino Redentor, por la paz y concordia de las naciones, por la conversión de los enemigos de nuestra fe y por la felicidad de todos los cristianos. 

Gloria al Padre … 

Bendecido …

 

III.  Padre Eterno, te ofrezco los méritos de la Preciosa Sangre de Jesús, tu Amadísimo Hijo y Nuestro Divino Redentor, por la arrepentimiento de todos los no-creyentes, la extirpación de las herejías, y la conversión de los pecadores.

Gloria al Padre … 

Bendecido …

 

IV.  Padre Eterno, te ofrezco los méritos de la Preciosa Sangre de Jesús, tu Amadísimo Hijo y Nuestro Divino Redentor, por todas mis relaciones, amigos y enemigos, por los pobres, los enfermos, y aquellos en tribulación, y or todos los que tu deseas que yo ore, o consideras que debería de orar.

Gloria al Padre … 

Bendecido …

 

V.  Padre Eterno, te ofrezco los méritos de la Preciosa Sangre de Jesús, tu Amadísimo Hijo y Nuestro Divino Redentor, por todos aquello que este día pasaran a la otra vida, para que los preserves de las penas del infierno y los admitas a la posesión de tu Gloria.

Gloria al Padre … 

Bendecido …

 

VI.  Padre Eterno, te ofrezco los méritos de la Preciosa Sangre de Jesús, tu Amadísimo Hijo y Nuestro Divino Redentor, por todos aquellos que son amantes del gran tesoro de su sangre, y por todos los que se me unen en adorarlo y honrarlo, y por todos los que ayudan a dar a conocer esta devoción.

Gloria al Padre … 

Bendecido …

 

VII  Padre Eterno, Padre Eterno, te ofrezco los méritos de la Preciosa Sangre de Jesús, Tu Amadísimo Hijo y Nuestro Divino Redentor, por todas mis necesidades, tanto espirituales como temporales, por las Almas del Purgatorio, y en particular por todos aquellos que en su vida fueron devotos al precio de su Redención, y por los dolores y sufrimientos de nuestra Madre, María Santísima.....

Gloria al Padre … 

Bendecido …

Bendecida y exaltada sea la Sangre de Jesús, ahora y siempre, y por toda la eternidad. Amen.



[S.P. Ap. 1931; La Raccolta (edición típica romana)]