Misa Diaria y Lecturas

¿No puede asistir a la Santa Misa? EWTN le ofrece las lecturas del día para permitirle seguir la Misa diaria en su transmisión por televisión. Las lecturas también son ideales para hallar tiempo durante el día para la reflexión espiritual. Escuche, vea o lea desde la comodidad de su hogar. Esta página incluye las lecturas del día y videos en línea, un recurso para todo el que desee vivir la vida de fe que agrada a nuestro Señor.

Sábado 31 de agosto de 2024

* Escoja la fecha en el calendario para ver las lecturas | Acceso al calendario para personas invidentes
También puede ver la Santa Misa diaria desde Madrid, España, cortesía de Magnificat.tv

SIGUE LA MISA DIARIA

¡Recibe el eBook de la Guía para la Misa Global Televisada por correo electrónico y celebra la belleza universal de la Misa!

Con textos en español y latín, la Guía para la Misa Global Televisada te guía a lo largo de la Misa diaria que ofrecemos en EWTN.

El Padre Joseph Mary Wolfe dice: «Hemos integrado este pequeño cuadernillo para ti, para ayudarte a unirte a la Iglesia Universal en todo el mundo a cantar las alabanzas del Señor mientras rezamos y cantamos juntos, unidos en el Sagrado Sacrificio de la Misa por EWTN».

RECIBE LA GUÍA PARA LA MISA GLOBAL TELEVISADA

 

Sábado Memoria de la Santísima Virgen María

Primera Lectura

1 Corintios 1:26-31

26Considerad, si no, hermanos, vuestra vocación; porque no hay entre vosotros muchos sabios según la carne, ni muchos poderosos, ni muchos nobles;
27sino que Dios escogió la necedad del mundo para confundir a los sabios, y Dios eligió la flaqueza del mundo para confundir a los fuertes;
28escogió Dios a lo vil, a lo despreciable del mundo, a lo que no es nada, para destruir lo que es,
29de manera que ningún mortal pueda gloriarse ante Dios.
30De Él os viene que estéis en Cristo Jesús, a quien Dios lo hizo para nosotros sabiduría, justicia, santificación y redención,
31para que, como está escrito: El que se gloría, que se gloríe en el Señor.

Salmo Responsorial

Salmo 33:12-13, 18-21

12Dichosa la nación cuyo Dios es el Señor,
el pueblo que Él se eligió como heredad.
13El Señor mira desde los cielos,
ve a todos los hijos de Adán.
18Los ojos del Señor velan por quienes le temen,
por los que esperan en su misericordia,
19para librar sus almas de la muerte,
y hacerlos subsistir en la penuria.
20Nuestra alma espera en el Señor,
Él es nuestro socorro y nuestro escudo;
21en Él se alegra nuestro corazón,
en su santo Nombre confiamos.

Evangelio

Mateo 25:14-30

14»Porque es como un hombre que al marcharse de su tierra llamó a sus servidores y les entregó sus bienes.
15A uno le dio cinco talentos, a otro dos y a otro uno sólo: a cada uno según su capacidad; y se marchó.
16El que había recibido cinco talentos fue, trabajó con ellos y ganó otros cinco.
17Del mismo modo, el que había recibido dos ganó otros dos.
18Pero el que había recibido uno fue, hizo un hoyo en la tierra y escondió el dinero de su señor.
19Después de mucho tiempo, regresó el amo de dichos servidores e hizo cuentas con ellos.
20Cuando se presentó el que había recibido los cinco talentos, entregó otros cinco diciendo: «Señor, cinco talentos me entregaste; mira, he ganado otros cinco talentos».
21Le respondió su amo: «Muy bien, siervo bueno y fiel; como has sido fiel en lo poco, yo te confiaré lo mucho: entra en la alegría de tu señor».
22Se presentó también el que había recibido los dos talentos y dijo: «Señor, dos talentos me entregaste; mira, he ganado otros dos talentos».
23Le respondió su amo: «Muy bien, siervo bueno y fiel; como has sido fiel en lo poco, yo te confiaré lo mucho: entra en la alegría de tu señor».
24Cuando llegó por fin el que había recibido un talento, dijo: «Señor, sé que eres hombre duro, que cosechas donde no sembraste y recoges donde no esparciste;
25por eso tuve miedo, fui y escondí tu talento en tierra: aquí tienes lo tuyo».
26Su amo le respondió: «Siervo malo y perezoso, sabías que cosecho donde no he sembrado y que recojo donde no he esparcido;
27por eso mismo debías haber dado tu dinero a los banqueros, y así, al venir yo, hubiera recibido lo mío con los intereses.
28Por lo tanto, quitadle el talento y dádselo al que tiene los diez.
29»Porque a todo el que tiene se le dará y tendrá en abundancia; pero al que no tiene incluso lo que tiene se le quitará.
30En cuanto al siervo inútil, arrojadlo a las tinieblas de afuera: allí habrá llanto y rechinar de dientes».