Angelus: 28 de marzo

Autor: Juan Pablo II

JUAN PABLO II

ÁNGELUS

28 de marzo de 1999
Domingo de Ramos

   

Dirijo un saludo cordial a los peregrinos de lengua italiana, de modo particular a los jóvenes que han participado en esta celebración. Amadísimos jóvenes romanos e italianos, sé que os estáis preparando con gran empeño para la XV Jornada mundial de la juventud, que tendrá lugar aquí, en Roma, durante el mes de agosto del año 2000. Proseguid por este camino, que implica a las diócesis, las parroquias, las asociaciones y los movimientos, con espíritu de unidad y colaboración. Os corresponderá a vosotros acoger del mejor modo posible a vuestros coetáneos, que llegarán de todas partes del mundo, y darles un testimonio de auténtica fe y fraternidad cordial.

Deseo dar las gracias a la región de la Pulla, que ha regalado los olivos que adornan la plaza de San Pedro y los ramos que han servido para la celebración de esta mañana. Quiera Dios que estos ramos sean el símbolo de la paz a la que aspiran las poblaciones de la región balcánica. En este día, roguemos con fervor al «Príncipe de la paz», que se nos presenta tan inerme, que inspire a todos los que empuñan un arma. Que también en esa parte de Europa la fraternidad y la comprensión prevalezcan sobre las fuerzas del odio. El Papa está con el pueblo que sufre, y grita a todos: ¡siempre es la hora de la paz! Nunca es demasiado tarde para encontrarse y negociar.

Saludos

Saludo con gran afecto a los jóvenes de España y América Latina. Os invito, unidos a toda la Iglesia que se prepara al jubileo del año 2000, a fijar la mirada en Dios Padre y a escuchar con gozo y asombro las palabras de Jesús: «El Padre os ama». Os convoco a todos a participar en la próxima Jornada mundial de la juventud, que se celebrará en Roma el mes de agosto del año 2000.

Copyright © Libreria Editrice Vaticana