Misa Diaria y Lecturas
¿No puede asistir a la Santa Misa? EWTN le ofrece las lecturas del día para permitirle seguir la Misa diaria en su transmisión por televisión. Las lecturas también son ideales para hallar tiempo durante el día para la reflexión espiritual. Escuche, vea o lea desde la comodidad de su hogar. Esta página incluye las lecturas del día y videos en línea, un recurso para todo el que desee vivir la vida de fe que agrada a nuestro Señor.
Lunes 3 de agosto de 2026
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El Padre Joseph Mary Wolfe dice: «Hemos integrado este pequeño cuadernillo para ti, para ayudarte a unirte a la Iglesia Universal en todo el mundo a cantar las alabanzas del Señor mientras rezamos y cantamos juntos, unidos en el Sagrado Sacrificio de la Misa por EWTN».

Feria
Eighteenth Week in Ordinary Time
Primera Lectura
Jeremías 28:1-17
1Aconteció aquel mismo año, al principio del reinado de Sedecías, rey de Judá, concretamente el quinto mes del año cuarto, que Ananías, hijo de Azur, profeta de Gabaón, me dijo en el Templo del Señor, a la vista de los sacerdotes y de la multitud del pueblo:
2—Esto dice el Señor de los ejércitos, el Dios de Israel: «Voy a quebrar el yugo del rey de Babilonia.
3En el plazo de dos años haré que vuelvan a este lugar todos los objetos del Templo del Señor que arrebató Nabucodonosor, rey de Babilonia, llevándoselos de aquí a Babilonia.
4Y también a Jeconías, hijo de Yoyaquim, rey de Judá, y a todos los deportados de Judá que fueron a Babilonia, Yo los haré volver a este lugar —oráculo del Señor—, porque, en efecto, quebraré el yugo del rey de Babilonia».
5Respondió el profeta Jeremías al profeta Ananías, a la vista de los sacerdotes y de la multitud del pueblo presentes en el Templo del Señor.
6Esto dijo el profeta Jeremías:
—¡Amén! ¡Que así lo haga el Señor! ¡Que el Señor cumpla las palabras que profetizaste y haga volver de Babilonia a este lugar los objetos del Templo del Señor y a todos los deportados!
—¡Amén! ¡Que así lo haga el Señor! ¡Que el Señor cumpla las palabras que profetizaste y haga volver de Babilonia a este lugar los objetos del Templo del Señor y a todos los deportados!
7Pero escucha, por favor, esta palabra que yo voy a pronunciar ante tus oídos y los de todo el pueblo:
8«Los profetas que nos precedieron, a ti y a mí, desde antaño profetizaron guerras, desgracias y pestes a muchos países y a grandes reinos.
9Si un profeta vaticinaba la paz, cuando se cumplía la palabra del profeta, se reconocía que verdaderamente lo había enviado el Señor».
10Entonces el profeta Ananías agarró el yugo que estaba puesto en el cuello del profeta Jeremías y lo rompió.
11Y habló Ananías en presencia de todo el pueblo y dijo:
—Esto dice el Señor: «Así quebraré, en el plazo de dos años, el yugo de Nabucodonosor, rey de Babilonia, puesto sobre el cuello de todas las naciones». Pero el profeta Jeremías se marchó por su camino.
—Esto dice el Señor: «Así quebraré, en el plazo de dos años, el yugo de Nabucodonosor, rey de Babilonia, puesto sobre el cuello de todas las naciones». Pero el profeta Jeremías se marchó por su camino.
12Luego, después de que el profeta Ananías quebrara el yugo que estaba puesto en el cuello del profeta Jeremías, fue dirigida la palabra del Señor a Jeremías en estos términos:
13—Vete y habla así a Ananías: «Esto dice el Señor: “Tú has quebrado un yugo de madera, pero Yo lo sustituiré por yugos de hierro”.
14Que así dice el Señor de los ejércitos, el Dios de Israel: “Yugo de hierro he puesto al cuello de todas estas naciones para que sirvan a Nabucodonosor, rey de Babilonia. Y le servirán. Hasta las bestias del campo se las he dado”».
15Entonces el profeta Jeremías le habló al profeta Ananías:
—¡Por favor, Ananías, escucha! El Señor no te ha enviado, pero tú has inducido a este pueblo a una confianza falsa.
—¡Por favor, Ananías, escucha! El Señor no te ha enviado, pero tú has inducido a este pueblo a una confianza falsa.
16Por eso, así dice el Señor: «Mira que voy a expulsarte de la faz de la tierra. Este año morirás, pues has predicado apostasía contra el Señor».
17Y el profeta Ananías murió aquel año, en el séptimo mes.
Salmo Responsorial
Salmo 119:29, 43, 79-80, 95, 102
29Aparta de mí el camino falso,
y dame la gracia de tu Ley.
y dame la gracia de tu Ley.
43No quites de mi boca la palabra veraz,
pues espero en tus juicios;
pues espero en tus juicios;
79Vuelvan a mí los que te temen,
los que reconocen tus preceptos.
los que reconocen tus preceptos.
80Que sea íntegro mi corazón en seguir tus estatutos,
para que no quede avergonzado.
para que no quede avergonzado.
95Me acechan los impíos para perderme,
pero yo medito tus preceptos.
pero yo medito tus preceptos.
102No me he desviado de tus normas
porque Tú me has guiado.
porque Tú me has guiado.
Evangelio
Because this Gospel was not read on Sunday, it is read today.
Mateo 14:13-21
13Al oírlo Jesús se alejó de allí en una barca hacia un lugar apartado él solo. Cuando la gente se enteró le siguió a pie desde las ciudades.
14Al desembarcar vio una gran muchedumbre y se llenó de compasión por ella y curó a los enfermos.
15Al atardecer se acercaron sus discípulos y le dijeron:
—Éste es un lugar apartado y ya ha pasado la hora; despide a la gente para que vayan a las aldeas a comprarse alimentos.
—Éste es un lugar apartado y ya ha pasado la hora; despide a la gente para que vayan a las aldeas a comprarse alimentos.
16Pero Jesús les dijo:
—No hace falta que se vayan, dadles vosotros de comer.
—No hace falta que se vayan, dadles vosotros de comer.
17Ellos le respondieron:
—Aquí no tenemos más que cinco panes y dos peces.
—Aquí no tenemos más que cinco panes y dos peces.
18Él les dijo:
—Traédmelos aquí.
—Traédmelos aquí.
19Entonces mandó a la gente que se acomodara en la hierba. Tomó los cinco panes y los dos peces, levantó los ojos al cielo, pronunció la bendición, partió los panes y los dio a los discípulos y los discípulos a la gente.
20Comieron todos hasta que quedaron satisfechos, y de los trozos que sobraron recogieron doce cestos llenos.
21Los que comieron eran unos cinco mil hombres, sin contar mujeres y niños.